EQUILIBRIO ENTRE LOS CENTROS ENERGÉTICOS: PÉLVICO Y ESCAPULAR.
(Acercamiento a la posición correcta erguida. - Localización
de los centros energéticos pélvico y escapular. -Verticalidad. - Conceptos de retroversión y anteroversión pélvicas. - Conceptos
de apertura y cierre de omóplatos y de las correspondientes rotaciones de
brazos, externa e interna) -ver Cuerpo en armonía - p.178 ej. 139 y 140-.
a. El centro energético principal es el pélvico, situado
en el punto intermedio entre el ombligo y el pubis. / el útero / Desarrollo de
la conciencia de ese centro. Suele estar desconocido, caído, sin la fuerza
necesaria que equilibra la pelvis, manteniéndola en la verticalidad.
b. El otro centro energético que veremos después es el
correspondiente al cinturón escapular. Este requiere una cierta fuerza en los
omóplatos -cierre- y en las vértebras dorsales, que equilibran el tórax abriendo
el pecho. -También suele ser bastante desconocido-.
c. Entre ambos centros energéticos se mantiene el
equilibrio de la columna vertebral y del cuerpo en general. El 1º situado
adelante abajo, requiere una cierta tensión de los abdominales y abre
compensatoriamente las lumbares. El 2º sitúado atrás arriba con una cierta fuerza de
los músculos dorsales que cierran los omóplatos y abren el pecho. De este modo
se equilibra la zona inferior con la superior y con ello el conjunto del
cuerpo. Hay que tener consciencia de estos centros al estar de pie, sentados y
al caminar, para que la columna se mantenga erguida equilibrada, sin
descompensaciones.
La falta de consciencia y del tono justo, acarreará a la
larga, problemas en la columna. Problemas de salud y de presencia y elegancia
corporal.
d. Para comenzar a tomar consciencia de la pelvis, nos la
tocamos localizando huesos: iliacos hacia el pubis -abajo adelante- y hacia arriba atrás – unión con el
sacro y desde este con el coxis.
El suelo pélvico delimitado por los isquiones
a los lados, el coxis atrás y el pubis adelante, formado un rombo.
La musculatura se delimita por la del ano,
genitales y uretra.
Los movimientos de la pelvis en el plano sagital -adelante–atrás- mantienen activos y vivos esos tejidos.
Para que la pelvis se mantenga
en la vertical, el suelo pélvico ha de estar situado en la horizontal.
e. Movimientos con manos en pelvis, izquierda en sacro –
coxis / derecha en vientre / retroversión = estiramiento del psoas atrás + contracción
abdominales adelante – juego agonistas antagonistas / anteroversión lo
contrario de retroversión. (En lenguaje vulgar decimos meter -retroversión- y sacar -anteroversión- el culo)
f. Colocación y
movimientos básicos de la pelvis: retro /
antero / Repercusiones hacia columna y pies. Retroversión = inclinación de los
iliacos hacia atrás / Anteroversión = inclinación hacia adelante. Se puede
hacer el movimiento de la pelvis independizándolo del resto del cuerpo o lo
podemos hacer de modo que se transmita a todo el cuerpo hacia los pies y la
cabeza a través de la columna.
g. Centro
escapular. Lo
localizamos mediante el movimiento de la articulación formada por tres huesos:
clavícula, húmero y omóplato y centrándolo en los omóplatos. (Nos los tocamos
para percibirlos mejor) El movimiento de omóplatos lo definimos como abrirlos - separarlos de la columna- y cerrar -acercarlos a la columna. Su posición correcta
es más bien cerrados, habiendo entre ellos unos 7 centímetros. Ahí radicaría el
centro energético. Si los cerramos más influye en las lumbares hundiéndolas,
provocando una anteroversión pélvica y desequilibrando ese centro. Por el
contrario, si los separamos más de la cuenta, la zona dorsal se achepa.
El cierre de omóplatos provoca la rotación
externa de los brazos, si canalizamos la energía hacia las manos.
La apertura
de omóplatos lo contrario, la rotación interna de los brazos.
Hacemos diferentes
variaciones de los movimientos de brazos para después hacer una secuencia de
movimiento involucrando a todo el cuerpo y jugando con la tensión y la
distensión: (1) cierre de omóplatos + rotación externa de brazos llevándolos por
detrás hacia la vertical. Bajada por el mismo camino aflojando la tensión.
Desde la vertical bajamos después por delante -trabajando previamente un poco
el aflojamiento desde manos, con la imagen de languidecer, y así llegamos a
realizar un pequeño derrumbamiento de la columna con la bajada de los brazos
hacia las rodillas. Subida de brazos + enderezamiento de columna + subida de
tensión – bajada por detrás con aflojamiento. Repetimos de adelante atrás y viceversa.
(2)
Movimientos de brazos de adelante atrás y viceversa combinando rotaciones
internas con externas, involucrando a todo el cuerpo y jugando con la tensión y
la distensión. (3) combinación de (1) y (2) jugando libremente con ello