miércoles, 31 de diciembre de 2014

Características del método (MO - TCA)


(Movimiento Orgánico MO - Técnicas Corporales Aplicadas TCA)
Características del método


Partiendo del movimiento como actividad fundamental se propone trabajar objetivos múltiples encuadrados dentro de la múltiple dimensión del ser humano.
1.    La estimulación sensorial, -neuronal-cerebral-, a través del cuerpo y del movimiento,  potencia la actividad cerebral, alivia y previene la desestructuración mental de ciertas patologías y demencias-, constituye la base de toda la metodología meramente física.
2.    El movimiento considerado como fuente de salud engloba distintos aspectos: corrección postural, cuidado de las articulaciones, flexibilización, alivio de tensiones, problemas óseo-musculares; utilización correcta de la energía, etc.
3.    El movimiento como medio de desarrollar las capacidades mentales dirige sus objetivos hacia la estructuración espacial y temporal, la coordinación, la memoria, la secuenciación y la organización mental.
4.    El movimiento y el cuerpo como medios de comunicación y de relación, abarca fundamentalmente dos aspectos: Por un lado definir la relación óptima que el profesor ha de establecer con sus alumnos –y de los alumnos entre si- mediante su actitud, su disponibilidad, su atención y su contacto corporal. Por otro lado, enriquecer la comunicación y la creatividad de cada uno.
5.    La base de este punto se centra en el desarrollo y el trabajo sobre la afectividad. La afectividad como estímulo para ser, aprender, sanarse y relacionarse;
Esta concepción implica a su vez un enfoque distinto de abordar y desarrollar el movimiento. Un enfoque vivencial en el que el movimiento es abordado no como un ejercicio físico mecanicista, sino  como una exploración sensorial. Supone un largo camino lleno de contenidos que descubrir, disfrutar, conocer e integrar. En este largo proceso, hay que darse tiempo para explorar y sentir el movimiento. La exploración y el darse tiempo para saborear el movimiento van unidos. Saborearlo es sentirlo y disfrutarlo. Y para disfrutarlo no hay que tener prisa. Al contrario. El movimiento es nuestro acto más grande de empoderamiento personal, de desarrollar nuestro ser.
Sentir nuestro cuerpo mediante el movimiento va a significar habitarlo, llenarlo, darle integridad y plenitud. Lo que significa a su vez ser consciente de él en sus múltiples quehaceres. Nuestro cuerpo está presente en nuestra mente, en nuestro sentimiento. Nos hacemos presentes y conscientes nosotros mismos en nuestra integridad. Un cuerpo vacío es un cuerpo enfermo, un ser fragmentado, compuesto de trozos sueltos. Un cuerpo máquina sin sentimientos conscientes.  El estrés y las múltiples dolencias sin localización y sin causa específica es una de las manifestaciones.
Nosotros no somos nosotros sin estar presentes en nuestro cuerpo, pero tampoco somos nosotros sin estar presentes en los demás, y en los elementos comunes que compartimos, como el tiempo, el espacio, los objetos que nos rodean y utilizamos, herramientas, muebles, máquinas, etc. Significa ser consciente de todo ello lo más posible.
Al explorar la casi infinita gama de movimiento de que disponemos vamos a hacerlo con esas pautas.
Esa ilimitada gama no quiere decir que no tenga límites. Los tiene bien claros. Respecto al movimiento, al espacio y a los demás. Ser consciente de las posibilidades y de los límites nos centra, nos sitúa, nos orienta. Las posibilidades y los límites son referencias claras para saber lo que somos, para vivir y para relacionarnos. Para no dañarnos ni física ni emocionalmente, ni para dañar a los demás. No saber cuáles son las posibilidades es menospreciarnos, tener una imagen pobre de nosotros. No saber cuáles son nuestros límites significa creernos más de lo que somos. La exploración lenta- permite disfrutar, llegar al máximo sin dañarse, previniendo los riesgos.

Concepción –integral- del movimiento.

  1. Concepción –integral- del movimiento.

Tener una concepción integral del movimiento va mucho más allá de la concepción meramente física donde únicamente nos preocupamos de la corrección postural y de la resolución de los problemas fisiológicos, aparte de un enfoque y tratamientos mecanicistas.

Me preocupa esa cuestión, sí, pero tanto o más, me preocupan también otros aspectos.

Quiero desarrollar el movimiento en su totalidad. Propiciar y desarrollar todas las posibilidades de movimiento en las articulaciones y segmentos, pelvis y columna, basándome en lo que considero las leyes naturales del Movimiento Orgánico. Ello potencia el equilibrio corporal en sus músculos y huesos, la movilidad plena y como consecuencia el alivio de tensiones y dolencias, ya que estas son la causa tanto de malas posturas como de  movimientos  restringidos.
  
En esta concepción integral del movimiento se incluyen todos mis conocimientos al respecto, englobando algunos aspectos de la psicomotricidad, la eutonía, la expresión y la  integración estructural sobre todo.
La concepción “integral” del movimiento significa además que no es solamente una dimensión física, sino que tiene un alcance psíquico, mental, emocional, cognitivo, creativo  y social, -relacional, comunicacional-. (Explicaré esto último más adelante)
Como referencia a esto ver:
(1)  Cuerpo en armonía. Benito Vallejo, Joaquín. Pags. 35 a 40 y
(2)  Cuerpo, mente, comunicación. Benito Vallejo, Joaquín. Pags. 19 a 32.


El movimiento es enfocado y desarrollado en su múltiple dimensión BIO – PSICO – SOCIAL, lo cual significa la unidad entre el cuerpo, la mente y la comunicación.


1.    El movimiento como medio de estimulación sensorial y mental;
2.    El movimiento como fuente de salud;
3.    El movimiento como medio de desarrollar las capacidades mentales:
4.    El movimiento como medio de expresión, comunicación y relación con los demás.
(Estos 4 puntos forman el grueso –desde el capítulo 2 al 4 –pags. 49 a 170- de mi segundo libro: Cuerpo, mente, comunicación)
5.    La afectividad como estímulo para ser, aprender, sanarse y relacionarse.
(En cuanto a este punto, estoy elaborando un nuevo libro, que lo iré dando a conocer poco a poco)
Características del método


(Movimiento Orgánico y Técnicas Corporales Aplicadas)


Partiendo del movimiento como actividad fundamental se propone trabajar objetivos múltiples encuadrados dentro de la múltiple dimensión del ser humano.


a)   La estimulación sensorial, -neuronal-cerebral-, a través del cuerpo y del movimiento,  potencia la actividad cerebral, alivia y previene la desestructuración mental de ciertas patologías y demencias-, constituye la base de toda la metodología meramente física.


b)   El movimiento considerado como fuente de salud engloba distintos aspectos: corrección postural, cuidado de las articulaciones, flexibilización, alivio de tensiones, problemas óseo-musculares; utilización correcta de la energía, etc.


c)   El movimiento como medio para activar y desarrollar las capacidades mentales dirige sus objetivos hacia la estructuración espacial y temporal, la coordinación, la memoria, la secuenciación y la organización mental.


d)   El movimiento y el cuerpo como medios de comunicación y de relación, abarca fundamentalmente dos aspectos: Por un lado definir la relación óptima que el profesor ha de establecer con sus alumnos –y de los alumnos entre si- mediante su actitud, su disponibilidad, su atención y su contacto corporal. Por otro lado, enriquecer la comunicación y la creatividad de cada uno.


e)   La base de este punto se centra en el desarrollo y el trabajo sobre la afectividad. La afectividad como estímulo para ser, aprender, sanarse y relacionarse; Que a su vez se refleja en el trabajo práctico de la educación del tacto y del contacto corporal.

(La salud –integral- no es solo física, abarca mucho más. Tiene que ver con la presencia corporal, -habitar el propio cuerpo, conectar consigo mismo-, integrar en el yo corporal consciente, la consciencia del espacio en que habitamos e integrar en él, a las demás personas con las que compartimos el espacio. –El Yo – el espacio – los otros-)
 
 
 

martes, 25 de noviembre de 2014

ESTRUCTURACIÓN ESPACIAL


VIVENCIA Y ESTRUCTURACIÓN ESPACIAL
Joaquín Benito Vallejo  
(Ver: estructuración espacial – Cuerpo, mente, comunicación pag.  134 y sig,)




Espacio y cuerpo son indisociables. Viven el uno del otro. Se conforman mutuamente. El cuerpo ocupa un espacio determinado y el cuerpo se mueve en otro espacio. El espacio de su acción, de su interrelación, de su comunicación.


El espacio se configura mediante la acción y en relación al cuerpo. El cuerpo es el centro de esa acción. La acción es el movimiento.


El cuerpo y el movimiento se dibujan en el espacio, se esculpen, se diseñan, se coreografían, se musicalizan. El espacio queda así configurado, habitado, sensorializado, disfrutado, sentimentalizado, imaginado, humanizado por el movimiento.


Tanto la estructura corporal como el movimiento se han conformado y desarrollado como una adaptación a desenvolverse del mejor modo posible sobre una superficie sólida y un espacio aéreo. La tierra y el aire, -el cielo-.


Su control postural y su movimiento dependen de estos dos elementos.  La tierra significa la fuerza gravitatoria que tira de nosotros hacia abajo, nos enraíza, es el asiento que nos sostiene, nos da seguridad, nos mantiene en la realidad, nos ata, nos limita. El cielo es la dirección hacia la que nuestra energía se dirige para movernos, es la libertad, la ensoñación, el ideal. Cielo y tierra en lucha y en acuerdo permanente.

miércoles, 5 de noviembre de 2014

Leyes naturales del movimiento



Dentro de lo que consideramos las leyes del  movimiento, expuestas en nuestro libro "Cuerpo en armonía", vamos a ir comentando aquí dichas leyes.
Las leyes naturales del movimiento son también inherentes a los organismos vivos.
En cualquier movimiento o "ejercicio" se encuentran todas ellas, pero en algunos ejercicios concretos ponemos más la atención en unas que en otras, o queremos darle más importancia, o la desarrollamos más.
Puede ser también que dentro de un objetivo general se encuentre otro más específico o esencial.
Esto se irá viendo a nivel práctico en la página: Diario de clase
Bien, comienzo comentando algunas.

1- El juego alternativo entre la tensión  y la distensión. En el organismo vivo más primario se encuentre esta alternancia. La expansión y el repliegue, la inspiración y la espiración, la sístole y la diástole , etc. (1º) Siempre se da una fase de tensión o esfuerzo a la que debe seguir otra de alojamiento o descanso. Podemos desarrollar este aprendizaje en 4 periodos: - tensión + retención  / soltar  -distensión repentina- + pausa / tensión + retención  - aflojamiento lento graduado -distensión controlada- + pausa.)  / aprendizaje de la distensión /

2- Afinación del  tono  o de la tensión (2º) - hacerlo todo con la mínima tensión,
con  el esfuerzo justo, utilizando solo el grado de fuerza necesaria, ni más, ni tampoco menos  / tono óptimo /con la máxima suavidad y delicadeza.  economía de la energía / tono muscular - energía vital

3- Independización  (3)- localización adecuada del movimiento y por lo tanto del esfuerzo – no dejar que otras partes se tensen o se muevan)

4- Fluidez de la energía - Permitir que la energía convertida en movimiento recorra los canales anatómicos sin obstáculos, regando y activando otras zonas.
 
Guión de las LEYES NATURALES DEL MOVIMIENTO expuestas en Cuerpo en armonía.

1.    Respiración. ………………………………………......pag.45
2.    Ajuste y afinación del tono. …………………..…………...47
3.    El juego alternativo entre tensión y distensión.  ………..51
4.    Independización segmentaria y articular. ……………….54
5.    Equilibrio entre agonistas y antagonistas. ………………55
6.    Musculatura profunda y superficial; central y periférica. 57
7.    Pasaje de energía. ………………………………………...59
8.    Centros de energía: cintura pélvica y escapular. ……....61
9.    Coordinación. ………………………………………………66
10. Ritmo. ……………………………………………………..…68
11. Espacio ……………………………………………………...72
12. Equilibrio global. ……………………………………………74
     13.Melodía cinética. …………………………………………..76
Estas leyes se pueden ver desarrolladas en los ejercicios expuestos en el Diario de clase

jueves, 23 de octubre de 2014

PÉNDULOS DE BRAZOS


Péndulos de brazos 
Joaquín Benito Vallejo



  • Llamamos péndulos a los movimientos de balanceo. Los más característicos son los de los brazos. ( Por poner un símil, lo más parecido puede ser el movimiento del columpio, donde se da un impulso para la subida y la inercia en la caída) Pueden realizarse en diversas posiciones pero la más común, principal y clara es la posición erguida. Una vez realizados en esta posición pueden probarse otras.

  • Acciones físicas. Los péndulos propician mucha flexibilidad y soltura, así como amplitud, a la articulación, en el caso de los brazos a la triple  articulación: hombro-omóplato-clavícula, matriz del movimiento de los brazos. Y además relajan.

  • Actitud de comienzo. Para empezar, hemos de procurar dejar el brazo colgando relajado, suelto, similar a un cordón de algodón prendido del hombro, sin tensiones. Como el brazo tiene además otras articulaciones como el codo y la muñeca, el brazo no debe quedar estirado como un palo, sino que sus articulaciones permiten que el movimiento pendular se vea reflejado en ellas provocando ligeros pliegues y extensiones.

  • Planos. Los péndulos de brazos pueden realizarse en los diversos planos del movimiento así como en otras direcciones espaciales como diagonales visualizando los ángulos del prisma –cubo de Laban-. Plano sagital: adelante – atrás. Plano frontal: hacia los lados. Plano transversal: giros adelante atrás, izquierda derecha. En este último caso los péndulos pueden hacerse sin que se mantengan colgando, sino horizontales al suelo, pero la primera opción permite que se abra más la articulación. El movimiento en los diferentes planos posibilita aumentar el juego articular en todas sus posibilidades.

  • Coordinaciones. Los balanceos podemos, -debemos- hacerlos con ambos brazos, y con uno y  otro independientemente. Podemos llevar los 2 brazos iguales o en contra-movimiento, es decir, un brazo en una dirección el otro en la contraria. En el plano sagital sería: un brazo adelante, el otro atrás. En el frontal ambos hacia afuera o hacia adentro. En el transversal sería similar al plano frontal pero nunca de arriba abajo.

  • Respiración. Generalmente, el movimiento pendular de los brazos hace que la respiración se sincronice con él. De modo natural, orgánico, en el plano sagital se inspira al lanzar los brazos adelante arriba y se espira al caer e ir atrás. En otros planos se puede inspirar al ir en una dirección y espirar en la otra.

  • Organicidad. Los péndulos supone un juego orgánico de tensiones y distensiones. La fase de tensión se produce en el impulso, mientras la distensión en la inercia de la caída.

  • Las repercusiones orgánicas –fluidez de la energía- hacia otras partes del cuerpo, también están claras. En los impulsos siempre se tiende hacia el enderezamiento de columna anteroversión pélvica-, mientras que en la caída se va hacia el encorvamiento retroversión pélvica-. Hacia los apoyos con el suelo los pasajes pueden ir de talones a dedos en el plano sagital; de un pie a otro en los planos frontal y transversal. En cuanto a las rodillas pueden producirse flexiones o extensiones y cargas de peso alternativas en una u otra según los planos de movimiento.

  • Direcciones. Los impulsos pueden darse en una dirección o en otra. Lo natural es lanzar en la dirección más orgánica, que es por donde solemos empezar siempre, pero después puede hacerse en otra. En el plano sagital, el impulso natural es adelante arriba. Pero una vez vivenciado esto podemos dar los impulsos hacia atrás. Este modo desarrolla más la fuerza de la zona dorsal, omóplatos, romboides. Dentro del juego agonismo -  antagonismo muscular  abre y estira más los pectorales. En el plano frontal el comienzo natural es dar el impulso hacia el lado contrario con la apertura del omóplato, sin embargo, al trabajar con un brazo solo y también con ambos en contra-movimiento, podemos dar los impulsos hacia afuera, provocando también la fuerza dorsal y el estiramiento pectoral.

  • Ritmo. Los péndulos se someten también a un ritmo orgánico. Son en principio el ritmo natural del balanceo, del columpio o  del acunamiento, de 2, 3 o 4 tiempos.


 Pongamos un ejemplo de movimiento pendular de los brazos en el plano sagital.



PREPARACIÓN


1)    Posición erguida – observación de la verticalidad  del cuerpo –  piernas paralelas, pies a la misma distancia entre sí que las articulaciones de las caderas, es decir las ingles - apoyos con el suelo – repartición del peso – rodillas ligeramente flojas como muelles -pelvis “tendiendo” a la neutralidad, sin demasiada inclinación – cuello estirado, barbilla a cuatro dedos del pecho – brazos colgando sueltos…


2)    Sentir cómo se distribuye el peso del cuerpo a lo largo y ancho de los pies.


3)    Traslados de peso, (adelante – atrás); manteniendo el cuerpo como una línea recta que se inclina sin doblarse por la cintura ni por el cuello.


4)    Aflojamiento de rodillas-muelles, (subidas y bajadas suaves / manteniendo la pelvis neutra, recta, sin hundirse las lumbares.


5)    Levantar un brazo para sentir su peso, e intentar soltarlo desde arriba sin resistencias, soltando, dejándolo caer, relajando, percibiendo sus sacudidas y temblores orgánicos.


6)    Después de varias veces, observaremos las diferencias con el otro brazo. Primera toma de conciencia de las diferencias y de los efectos del movimiento: apertura de la articulación, activación sanguínea, relajación muscular, mejora de la imagen corporal, presencia…


7)    Sacudir tobillos.


8)    Como descarga mayor de las tensiones haremos ligeros rebotes de rodillas, y dejando que los rebotes se transmitan a hombros – brazos.


PÉNDULOS DE BRAZOS.


1)    Comencemos dejando el cuerpo relajado en la posición erguida…

2)    Observemos especialmente los brazos colgando sueltos desde la articulación, como cordones del algodón prendidos…

3)    Comenzamos a realizar un ligero balanceo. / Que los brazos vayan de adelante atrás sueltos y relajados ambos igual…

4)    Observamos que damos un pequeño impulso siempre igual hacia adelante arriba. La caída se produce por inercia sin que nosotros queramos…

5)    Vamos aumentando un poco la fuerza del impulso hasta que los brazos lleguen a la altura de la cabeza.

6)    Retengamos un momento los brazos arriba…

7)    Soltamos la fuerza comprobando que los brazos caen sueltos balanceándose libremente a los lados del cuerpo de adelante atrás, durante varias veces hasta que ellos solos se vayan parando…

8)    Demos de nuevo el impulso. Retengamos arriba durante unos segundos….  Dejémosles caer… (integración consciente de la fase de distensión pasiva)

9)    (Observemos: una cosa es dejar caer – no hacer ninguna fuerza / otra bien distinta es tirar – hacer otra fuerza distinta, incluso mayor…) Conciencia del impulso y de la inercia.

10) ¿los brazos caen libremente, balanceándose, sacudiéndose ligeramente sus articulaciones…?

11) Sigamos con los impulsos llevando los brazos por encima de la cabeza hacia la vertical. Dejémosles caer observando que llegan atrás donde hay un tope sobre el que rebotan, momento que utilizamos para volverlos a impulsar de nuevo.

12) Observamos el ritmo natural, orgánico, de los brazos en sus impulsos y caído similar al columpio…

13) Observamos nuestra respiración cómo se acopla al movimiento de modo natural también… (El mantenimiento del ritmo y de la respiración sincronizada no cansa)

14) Dejemos que cuando los brazos se caen, las rodillas se aflojen también como hacíamos en el punto 4 de la preparación anterior. Al impulsar los brazos arriba las rodillas se estiran. Al caer se doblan.

15) Sincronicemos el rebote de las rodillas con los impulsos de los brazos… Coordinación en sincronía orgánica de brazos y piernas en el movimiento.

16) Sigamos observando: en la subida, la pelvis se inclina ligeramente hacia adelante / anteroversión / –las lumbares se hunden o arquean-. Mientras que en la caída la pelvis se inclina ligeramente hacia atrás / retroversión / -las lumbares se ensanchan-, pero no excesivamente.

17) Si estamos trabajando en grupo, estableceremos un ritmo grupal. Toma de conciencia como grupo.

18) Siguiendo con el ritmo, al caer los brazos, vamos a dejar que se balanceen abajo tres veces y a la cuarta los lanzamos a la vertical.  Con ello establecemos una medida, - estructura o compás- de 4 tiempos.

19) Cuando queramos podemos volver al ritmo del principio, o combinar.

20) En las caídas las manos pueden ir llegando más abajo hasta llegar al suelo. Desde ahí el impulso ha de ser mayor para llegar a la vertical. Pero es importante ahora que el impulso se dé desde la pelvis por retroversión –no hundir las lumbares en el impulso- y por el empuje de los pies contra el suelo y el rebote de rodillas.

21) Vayamos aflojando después tomándonos un descanso.